Les contaba que habìa llegado a un bosque muy lindo. Caminando, encontré dentro del mismo un centro apícola, y tambien un jardìn botánico. Algunas especies de árboles estaban identificadas con cartelitos que indicaban el nombre cientìfico y el vulgar.
Mas adelante encontré esta casita que ven en las fotos siguientes ... tan linda ! Era cuadrada, y estaba rodeada de galerìas . Siempre me gustaron las casas con galerìas !
Muy cerca, un rùstico banco de madera, y una fuente muy particular donde iban a beber los pájaros .
Si a todo esto añadimos el entorno de aquellos arboles añosos, la imàgen era realmente soñada .
La casita resultò ser un museo. Quise visitarlo, pero me informaron que estaban ya cerrando, por lo cual me permitieron recorrerlo rapidito y no me cobraron la entrada .
Allì fue que vi por primera vez el rostro de Don Carlos, y es raro, pero de inmediato me gustó. Tiene algo en su mirada clara, como de rebelde , de soñador, tal vez algo de hippie ... no se... pero lo vi y de inmediato me gustó , me pareciò buena persona . Sentì que era del palo .
Esas imàgenes que veran en la pròxima entrega, despertaron mi curiosidad y a mi regreso, comencé a investigar sobre su vida, que hoy les empiezo a contar :
"No construiràs tu casa sobre la arena", parece que dice la biblia . A Don Carlos no le importò .
EN 19831 compró 1600 hectareas de dunas vivas ( VIVAS !- diría Susana ) . Dunas vivas significa montañas de arena que el viento va moviendo , un desierto árido e inóspito . Allí construyó la casita que ven , allí soñó un bosque y todos lo llamaron Loco . El loco de los Médanos.
El domador de arenas voladoras
Cuando Carlos Gesell, en 1931, compró alrededor de 1.600 hectáreas de dunas vivas frente al mar, no pensó en un futuro balneario. Este próspero comerciante soñaba con forestar las arenas voladoras con pinos y desarrollar una plantación que le proveyera madera para construir muebles para su tradicional negocio familiar, llamado Casa Gesel ( que vendìa cunitas, muebles y artículos para bebés ).
Don Carlos desafió el mito bíblico "no construirás tu casa sobre la arena" (San Mateo 7:26) y comenzó la construcción de su primera vivienda familiar el 14 de diciembre de 1931 que hoy alberga al Museo y Archivo Histórico Municipal.
La vivienda tiene características muy especiales, una de ellas hace que se la llame "La casa de los cuatro puertas", pues tiene una puerta de acceso en cada punto cardinal, con el fin de que si las tormentas de arena clausuraban algunas de las puertas, siempre hubiera otra por donde salir.
Su inventiva no terminó allí, diversos fueron los métodos utilizados por el fundador para fijar las dunas y posteriormente forestar. Se conocen todas las dificultades que atravesó hasta concretarla maratónica obra que le demandó gran parte de su vida. Su tarea se respira en el aire y todos los gesellinos lo develan con orgullo.
Hasta el "Che" Guevara no se privó de este paisaje, cuando en 1952, visitó la ciudad como paso previo a su viaje por América.
Poco antes de morir en 1979, era común oírle decir "ahora forestaré el Sahara".
jueves, 8 de enero de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario